4/06/2010

Pacífico


Hallar una novela en el mercado editorial que entretenga es fácil pero que te haga soltar la lectura para detener las emociones que de ella emanan es difícil de encontrar. El libro en cuestión se llama “Pacífico”, y el autor es José Antonio Garriga Vela.

Es una novela ciento setenta y cuatro páginas plagada de sensaciones y que presenta personajes (tanto principales como secundarios) construidos de manera intimista, totalmente reales y reconocibles en un nuestro entorno cotidiano. Su lectura es fácil en el sentido de que permite acabarla sin apenas necesitar hacer ningún alto en el proceso degustativo de leerla; pero no por ello deja ser una obra maestra, favorecida y difundida por los eficaces los comentarios que el boca a boca provoca.

A pesar de su brevedad, es una prosa con una intensidad narrativa sorprendente, exquisita, cuidada y elaborada al milímetro. De hecho, el autor ha tardado siete años en escribir esta novela. Una trama perfectamente hilvanada donde a veces se nos muestra a los personajes como actores de una obra de teatro dentro de una novela, con ambientes cerrados en los que domina el azar, elemento determinante en la vida de los protagonistas y de la familia en si.

El propio nombre de la novela, Pacífico, aunque sugiere múltiples interpretaciones, marca desde el comienzo el camino por el que discurre la narración. Pacífica es la forma de ser del protagonista de la historia. Te adentras en la trama de forma pacífica, sin darte cuenta, y no podrás salir de ella hasta terminar de leer la última página.

Con el paso del tiempo, los best-sellers pasan al olvido, tienen un ciclo de vida que normalmente es corto, pero esta novela queda muy lejos de ser uno de esos, pues le ocurrirá todo lo contrario: aunque lleva dos años ya en el mercado, acaba de comenzar su exitosa carrera literaria. Pacífico pertenece a esa clase de novelas que poco a poco van adquiriendo más importancia en la biblioteca de todo exquisito lector. De hecho, es una novela a la que le ha concedido el premio Dulce Chacón de 2009, que, para quién no lo sepa, es un premio que se concede a la mejor novela del año y al que no pueden presentarse los escritores, sino que se otorga a un autor concreto por una novela determinada.

Por último, debo decir que el final de la obra me impresionó por su fuerte y sorprendente desenlace. Y, a mi modo de ver, este aspecto quizás es lo que le resta algo de importancia al propio trabajo narrativo, quedando siempre el sabor del final, desmereciendo un poco la cuidada prosa.

Aun así, debo decir que no dudaré en comprar la próxima novela de José Antonio Garriga Vela.

Enhorabuena por este excelente trabajo narrativo.
© Miguel Urda

3 comentarios:

Loli Pérez dijo...

Miguel, la verdad es que es una novela estupenda, dónde no hay acción externa sino interna, está llena de miradas, de gestos, de sentimiento. Todo transcurre en espacios cerrados, pequeños... Está muy depurada y trabajada. Es una gran novela, aunque no llegue a las doscientas pgnas.

Abrazos
L;)

T.M. dijo...

Pués me habéis convencido, me la leeré, además de vuestros comentarios la editorial Anagrama ya es una garantía.
Saludos.

Ana dijo...

Gracias, tomo nota :-)