Ayer
en clase nos han preguntado cómo nos imaginamos nuestro libro
publicado. Ha habido respuestas de todo tipo, y es algo en lo que no
había pensando hasta el momento. Sí sé qué editorial me gustaría
que me lo publicase, pero ello no significa que me lo publique, bien
porque no tenga calidad, bien porque no esté dentro de su línea
editorial, bien porque.... A partir de ahí he ido formulándome
preguntas sobre la cuestión, sobre el tema. ¿Cuántas páginas
tendrá mi libro? Sé que hay una fórmula matemática que te
multiplica o divide el número de palabras por el número de folios y
te dice el número de páginas impresas de las que puede constar tu
libro, pero no la recuerdo y no voy a perder el tiempo en ello.
Tampoco me preocupa ahora mismo ni el tipo de letra, de papel, el
tamaño. Lo único que me ha preocupado ha sido la portada. ¿Cómo
debe ser la portada de una novela? Me levanto del ordenador y me voy
a mi biblioteca y escogo varias novelas al azar, cada una de una
editorial diferente. Las pongo sobre la mesa y las miro. Las hay de
todo tipo: con fotos de familia, de paisajes, collages,
cuadros impresionistas, abstractos, naif; mezclas de fotografías con
dibujos y photoshop...Todas
son diferentes pero a la vez todas tienen algo en común: hablan del
libro.
Lo
que sí tengo claro es que la portada de mi novela tiene que ser
sencilla y atraer al ojo dubitativo que está buscando -o pasando el
tiempo- entre las mesas de novedades de las librerías1.
Tengo unn amigo dibujante-fotógrafo de mucha confianza y estoy
seguro de que sabrá recoger mis ideas sobre lo que quiero que sea.
De lo que estoy completamente seguro es de que no quiero una cubierta con un cuadro. Cada vez que veo una novela cuya
cubierta es
un cuadro de Hopper directamente la descarto de una posible compra.
Es increíble el daño que se le está haciendo a este autor con
tanto abuso de sus cuadros: Hopper para ilustrar una novela de a
escritora de turno y que realmente no sabe lo que es una novela;
Hopper para ilustrar que la presentadora de
tele-astro, tele-cocina express o tele... no-sé-que
ha publicado un libro; Hopper para ilustrar la reedicion de unos
relatos ambientados en Estados Unidos. Por favor, seamos originales.
Dejemos a Hopper con su función de mostrar la soledad de los
personajes de un país, de una ciudad, de una habitación; dejemos a
Hopper para contemplarlo e indagar en su pintura; dejemos a Hopper libre de responsabilidades sobre ilustrar otra obra de arte que no
sea la suya. Pongamos la máquina de la mente a pensar para crear
nuestras portadas, nuestra forma de ver lo que nos rodea, nuestra
propia opinión de la vida que yo, mientras tanto no paro de darle
vueltas a la cabeza cómo será la cubierta de mi novela.
©
Miguel Urda. Texto
Foto.
Google
1Permitame,
lector, que no diga el porqué de esta frase. La explicaré en su
momento.
2 comentarios:
Has clavado el cliché de usar un estilo, autor, pintor, fotógrafo e incluso fotos o cuadros existentes para las portadas de distintos libros.
Gracias por defender a Hopper!!
Un abrazo
Woyzeck
Publicar un comentario